3/12/08

::::*Un Final Feliz::::

Hoy se términa una nueva experiencia, es provechoso poder mirar atrás y saber que en poco tiempo logramos adquirir nuevos conocimientos...el reflejo de ello es este blog....que poco a poco comenzó a despertar la curiosidad en mí.
Hoy se cierra un semestre y espero que el próximo, pueda acompañarnos en este gran desafío que hemos emprendido....estamos ha pasos de disfrutar de nuestro futuro como profesionales, y es muy gratificante que mestros como usted haya sido participe de este hermoso proceso....Hasta pronto y espero verlo el otro año


Hay dos tipos de educación, la que te enseña a ganarte la vida y la que te enseña a vivir.
Antony de Melo

Pd: y si no me saco el 70 bajo este artículo........jajaja

*_Sobre la Lectura_*

•Preguntas abiertas: Pueden formularse en forma oral o escrita, en los tres niveles de la comprensión lectora (explícito, implícito o inferencial y valorativo)
•Completación: Consiste en dar oraciones incompletas sobre el contenido de un trozo.
Verdadero o Falso: Este tipo de preguntas sirve para evaluar algunos tipos muy específicos de formación textual.
Selección Múltiple: Dentro de las respuestas objetivas, la de selección múltiple es la más adecuada para medir la capacidad de interpretar, analizar y evaluar
Expresiones creadoras: Es recomendable para niños pequeños que se inician en la comprensión de lectura, ya que ellos se centran en el dibujo, modelado, dramatizaciones, como una forma de expresar lo comprendido.
Ordenación secuencial: Consiste en entregar acciones sucedidas en el trozo en forma desordenada, el alumno debe ordenar estas acciones de acuerdo a como suceden

material facilitado por el profesor Roberto Castro

_*Estrategias de Lectura*_

Antes de la lectura
La técnica C-O-A ha sido desarrollada por Ogle (1986) para activar el conocimiento previo de los estudiantes y ayudarles a determinar sus propósitos frente a los textos .
Paso C : ¿Qué sé o conozco sobre el tema?:
Seleccione un aspecto relacionado específicamente con las ideas principales y los conceptos claves del material que leerán los alumnos y estimúlelos a comentario realizando una lluvia de ideas en relación al tópico, teniendo en mente la necesidad de activación y desarrollo de sus conocimientos previos.
Paso Q: ¿Qué quiero aprender?
Este paso es una consecuencia del anterior, A medida que los estudiantes comparten sus ideas, irán surgiendo áreas de incertidumbre o carencia de conocimientos.
Paso A: lo que he aprendido.
Invite a los estudiantes a escribir las respuestas a sus preguntas después de finalizar su lectura, observando qué preguntas no fueron respondidas a través de la lectura del texto o si ellos tienen preguntas adicionales.

Durante la Lectura
  • Inferencias y predicciones
  • Preguntas sobre lo leído
  • Preguntas orientadas hacia la estructura de la narración
  • Relación entre oraciones
  • Comprensión de las claves explícitas
  • Imágenes mentales y respuestas afectivas
  • Identificar la información importante o la ideas principales
  • Discusión sobre ideas principales
  • Monitoreo de la lectura y control de errores de comprensión
  • Tomar notas
  • Guías de estudio

Después de la Lectura

Las estrategias de procesamiento de la informa­ción después de leer un texto son válidas para recapitular el contenido, resumirlo, recordarlo, apreciarlo y ampliar los conocimientos del lector, incorporando los aportes del texto.

  • Recuerdo o paráfrasis
  • Organizadores gráficos
  • Esquemas
  • Resumen
  • Lectura crítica

*_*La Importancia de la Lectura*_*

He intentado por medio de este blog...mostrar un poco las cosas que le dan sentido a mi vida...como decia Nietzsche Aquel que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los "cómos"....creo que la vida se trata de ello....para mi un sentido, un "porqué" ....es la magia que tiene el leer y como a través de está poder recorrer mundos...y volar hacia los aprendizajes.
La lectura proporciona cultura, desarrolla el sentido estético, actúa sobre la formación de la personalidad, es fuente de recreación y de gozo.La lectura constituye un vehículo para el aprendizaje, para el desarrollo de la inteligencia, para la adquisición de cultura y para la educación de la voluntad. Por medio de la lectura se pueden satisfacer diferentes necesidades para leer y y escribir textos con diferentes propósitos.

  • Leer para obtener una información precisa
  • Leer para seguir instrucciones
  • Leer para obtener una información de carácter general
  • Leer para aprender
  • Leer para revisar un escrito propio
  • Leer por placer
  • Leer para comunicar un texto a un auditorio

2/12/08

*_Texto Octavo Básico_*

Nos han dado la tierra
Autro: Juan Rulfo
Después de tantas horas de caminar sin encontrar ni una sombra de árbol, ni una semilla de árbol, ni una raíz de nada, se oye el ladrar de los perros.
Uno ha creído a veces, en medio de este camino sin orillas, que nada habría después; que no se podría encontrar nada al otro lado, al final de esta llanura rajada de grietas y de arroyos secos. Pero sí, hay algo. Hay un pueblo. Se oye que ladran los perros y se siente en el aire el olor del humo, y se saborea ese olor de la gente como si fuera una esperanza.
Pero el pueblo está todavía muy allá. Es el viento el que lo acerca.
Hemos venido caminando desde el amanecer. Ahorita son algo así como las cuatro de la tarde. Alguien se asoma al cielo, estira los ojos hacia donde está colgado el sol y dice:-Son como las cuatro de la tarde.
Ese alguien es Melitón. Junto con él, vamos Faustino, Esteban y yo. Somos cuatro. Yo los cuento: dos adelante, otros dos atrás. Miro más atrás y no veo a nadie. Entonces me digo: "Somos cuatro". Hace rato, como a eso de las once, éramos veintitantos, pero puñito a puñito se han ido desperdigando hasta quedar nada más que este nudo que somos nosotros.
Faustino dice:-Puede que llueva.
Todos levantamos la cara y miramos una nube negra y pesada que pasa por encima de nuestras cabezas. Y pensamos: "Puede que sí".
No decimos lo que pensamos. Hace ya tiempo que se nos acabaron las ganas de hablar. Se nos acabaron con el calor. Uno platicaría muy a gusto en otra parte, pero aquí cuesta trabajo. Uno platica aquí y las palabras se calientan en la boca con el calor de afuera, y se le resecan a uno en la lengua hasta que acaban con el resuello. Aquí así son las cosas. Por eso a nadie le da por platicar.
Cae una gota de agua, grande, gorda, haciendo un agujero en la tierra y dejando una plasta como la de un salivazo. Cae sola. Nosotros esperamos a que sigan cayendo más y las buscamos con los ojos. Pero no hay ninguna más. No llueve. Ahora si se mira el cielo se ve a la nube aguacera corriéndose muy lejos, a toda prisa. El viento que viene del pueblo se le arrima empujándola contra las sombras azules de los cerros. Y a la gota caída por equivocación se la come la tierra y la desaparece en su sed.
¿Quién diablos haría este llano tan grande? ¿Para qué sirve, eh?
Hemos vuelto a caminar. Nos habíamos detenido para ver llover. No llovió. Ahora volvemos a caminar. Y a mí se me ocurre que hemos caminado más de lo que llevamos andado. Se me ocurre eso. De haber llovido quizá se me ocurrieran otras cosas. Con todo, yo sé que desde que yo era muchacho, no vi llover nunca sobre el llano, lo que se llama llover.
No, el llano no es cosa que sirva. No hay ni conejos ni pájaros. No hay nada. A no ser unos cuantos huizaches trespeleques y una que otra manchita de zacate con las hojas enroscadas; a no ser eso, no hay nada.
Y por aquí vamos nosotros. Los cuatro a pie. Antes andábamos a caballo y traíamos terciada una carabina. Ahora no traemos ni siquiera la carabina.
Yo siempre he pensado que en eso de quitarnos la carabina hicieron bien. Por acá resulta peligroso andar armado. Lo matan a uno sin avisarle, viéndolo a toda hora con "la 30" amarrada a las correas. Pero los caballos son otro asunto. De venir a caballo ya hubiéramos probado el agua verde del río, y paseado nuestros estómagos por las calles del pueblo para que se les bajara la comida. Ya lo hubiéramos hecho de tener todos aquellos caballos que teníamos. Pero también nos quitaron los caballos junto con la carabina.
Vuelvo hacia todos lados y miro el llano. Tanta y tamaña tierra para nada. Se le resbalan a uno los ojos al no encontrar cosa que los detenga. Sólo unas cuantas lagartijas salen a asomar la cabeza por encima de sus agujeros, y luego que sienten la tatema del sol corren a esconderse en la sombrita de una piedra. Pero nosotros, cuando tengamos que trabajar aquí, ¿qué haremos para enfriarnos del sol, eh? Porque a nosotros nos dieron esta costra de tapetate para que la sembráramos.
Nos dijeron:-Del pueblo para acá es de ustedes.
Nosotros preguntamos:-¿El Llano?- Sí, el llano. Todo el Llano Grande.
Nosotros paramos la jeta para decir que el llano no lo queríamos. Que queríamos lo que estaba junto al río. Del río para allá, por las vegas, donde están esos árboles llamados casuarinas y las paraneras y la tierra buena. No este duro pellejo de vaca que se llama Llano.
Pero no nos dejaron decir nuestras cosas. El delegado no venía a conversar con nosotros. Nos puso los papeles en la mano y nos dijo:-No se vayan a asustar por tener tanto terreno para ustedes solos.-Es que el llano, señor delegado...-Son miles y miles de yuntas.-Pero no hay agua. Ni siquiera para hacer un buche hay agua.
-¿Y el temporal? Nadie les dijo que se les iba a dotar con tierras de riego. En cuanto allí llueva, se levantará el maíz como si lo estiraran.- Pero, señor delegado, la tierra está deslavada, dura. No creemos que el arado se entierre en esa como cantera que es la tierra del Llano. Habría que hacer agujeros con el azadón para sembrar la semilla y ni aun así es positivo que nazca nada; ni maíz ni nada nacerá.- Eso manifiéstenlo por escrito. Y ahora váyanse. Es al latifundio al que tienen que atacar, no al Gobierno que les da la tierra.- Espérenos usted, señor delegado. Nosotros no hemos dicho nada contra el Centro. Todo es contra el Llano... No se puede contra lo que no se puede. Eso es lo que hemos dicho... Espérenos usted para explicarle. Mire, vamos a comenzar por donde íbamos...
Pero él no nos quiso oír.
Así nos han dado esta tierra. Y en este comal acalorado quieren que sembremos semillas de algo, para ver si algo retoña y se levanta. Pero nada se levantará de aquí. Ni zopilotes. Uno los ve allá cada y cuando, muy arriba, volando a la carrera; tratando de salir lo más pronto posible de este blanco terregal endurecido, donde nada se mueve y por donde uno camina como reculando.
Melitón dice:-Esta es la tierra que nos han dado.
Faustino dice:-¿Qué?
Yo no digo nada. Yo pienso: "Melitón no tiene la cabeza en su lugar. Ha de ser el calor el que lo hace hablar así. El calor, que le ha traspasado el sombrero y le ha calentado la cabeza. Y si no, ¿por qué dice lo que dice? ¿Cuál tierra nos han dado, Melitón? Aquí no hay ni la tantita que necesitaría el viento para jugar a los remolinos."
Melitón vuelve a decir:-Servirá de algo. Servirá aunque sea para correr yeguas.-¿Cuáles yeguas? -le pregunta Esteban.
Yo no me había fijado bien a bien en Esteban. Ahora que habla, me fijo en él. Lleva puesto un gabán que le llega al ombligo, y debajo del gabán saca la cabeza algo así como una gallina.
Sí, es una gallina colorada la que lleva Esteban debajo del gabán. Se le ven los ojos dormidos y el pico abierto como si bostezara. Yo le pregunto:-Oye, Teban, ¿de dónde pepenaste esa gallina?-Es la mía- dice él.-No la traías antes. ¿Dónde la mercaste, eh?-No la merqué, es la gallina de mi corral.-Entonces te la trajiste de bastimento, ¿no?-No, la traigo para cuidarla. Mi casa se quedó sola y sin nadie para que le diera de comer; por eso me la traje. Siempre que salgo lejos cargo con ella.-Allí escondida se te va a ahogar. Mejor sácala al aire.
Él se la acomoda debajo del brazo y le sopla el aire caliente de su boca. Luego dice:-Estamos llegando al derrumbadero.
Yo ya no oigo lo que sigue diciendo Esteban. Nos hemos puesto en fila para bajar la barranca y él va mero adelante. Se ve que ha agarrado a la gallina por las patas y la zangolotea a cada rato, para no golpearle la cabeza contra las piedras.
Conforme bajamos, la tierra se hace buena. Sube polvo desde nosotros como si fuera un atajo de mulas lo que bajara por allí; pero nos gusta llenarnos de polvo. Nos gusta. Después de venir durante once horas pisando la dureza del Llano, nos sentimos muy a gusto envueltos en aquella cosa que brinca sobre nosotros y sabe a tierra.
Por encima del río, sobre las copas verdes de las casuarinas, vuelan parvadas de chachalacas verdes. Eso también es lo que nos gusta.
Ahora los ladridos de los perros se oyen aquí, junto a nosotros, y es que el viento que viene del pueblo retacha en la barranca y la llena de todos sus ruidos.
Esteban ha vuelto a abrazar su gallina cuando nos acercamos a las primeras casas. Le desata las patas para desentumecerla, y luego él y su gallina desaparecen detrás de unos tepemezquites.-¡Por aquí arriendo yo! -nos dice Esteban.
Nosotros seguimos adelante, más adentro del pueblo.
La tierra que nos han dado está allá arriba.

*_Texto Séptimo Básico_*

Desde allá

Emilia Pardo Bazán

Don Javier de Campusano iba acercándose a la muerte, y la veía llegar sin temor, arrepentido de sus culpas; confiaba en la misericordia de aquel que murió por tenerla de todos los hombres. Sólo una inquietud lo acuciaba algunas noches de esas en que el insomnio fatiga a los viejos.Pensaba que, faltando él, entre sus dos hijos y únicos herederos nacerían disensiones, acerbas pugnas y litigios por cuestión de hacienda. Era don Javier muy acaudalado propietario, muy pudiente señor; pero no ignoraba que las batallas más reñidas por dinero las traban siempre los ricos. Ciertos amarguísimos recuerdos de la juventud contribuían a acrecentar sus aprensiones. Acordábase de haber pleiteado largo tiempo con su hermano mayor; pleito intrincado, encarnízado, interminable, que empezó entibiando el cariño fraternal y acabó por convertirlo en odio sangriento. El pecado de desear a su hermano toda especie de males, de haber injuriado y difamado, y hasta, ¡tremenda memoria!, de haberlo esperado una noche en las umbrías de un robledal con objeto de retarle a espantosa lucha, era el peso que por muchos años tuvo sobre su conciencia don Javier. Con la intención había sido fratricida, y temblaba al imaginar que sus hijos, a quienes tanto amaba, llegasen a detestarse por un puñado de oro. La naturaleza había dado a don Javier elocuente ejemplo y severa lección: sus dos hijos, varón y mujer, eran mellizos; al enviarlos al mundo a la misma hora, Dios les había mandado imperatívamente que se amaran; y herida desde su nacimiento la imaginación de don Javier, sólo cavilaba en que podían, sin embargo, aborrecerse hasta llegar al crimen. Para evitar que los celos de la ternura paternal engendrasen el odio, don Javier dio a su hijo la carrera militar y lo tuvo casi siempre apartado de sí; sólo cuando conoció que la vejez y los achaques lo empujaban a la tumba llamó a José María y permitió que sus cuidados filiales alternasen con los de María Josefa. A fuerza de reflexiones, el viejo había formado un propósito, y empezó a cumplirlo llamando aparte a su hija, en gran secreto, y diciéndole: -Hija mía, antes de que llegue tu hermano tengo que enterarte de algo que te importa. Óyeme bien, y no olvides ni una sola de mis palabras. No necesito afirmar que te quiero mucho; pero, además, tu sexo debe ser protegido de un modo especial y recibir mayor favor. He pensado en mejorarte, sin que nadie te pueda disputar lo que te regalo. Así que yo cierre los ojos..., así que reces un poco por mí..., te irás al cortijo de Guadeluz, y en la -sala baja, donde está aquel arcón muy viejo y muy pesado que dicen es gótico, contarás a tu izquierda, desde la puerta, dieciséis ladrillos -¡fíjate, dieciséis!, una onza de ladrillos, ¿entiendes? - y levantarás el que hace diecisiete, que tiene como la señal de una cruz, y algunos más alrededor. Bajo los ladrillos verás una piedra y una argolla; la piedra, recibida con argamasa fuerte. Quitarás la argamasa, desquiciarás la piedra y aparecerá un escondrijo y en él un millón de reales en peluconas y centenes de oro. ¡Son mis ahorros de muchos años! El millón es tuyo, sólo tuyo; a ti te lo dejo en plena propiedad. Y ahora, chitón, y no volvamos a tratar este asunto. ¡Cuando yo falte ... ! María Josefa sonrió dulcemente, agradeció en palabras muy tiernas, y aseguró que deseaba no tener jamás ocasión de recoger el cuantioso legado. Llegó José María aquella misma noche y ambos hermanos, relevándose por turno, velaron a don Javier, que decaía a ojos vistas. No tardó en presentarse el último trance, la hora suprema, y en medio de las crispaciones de una agonía dolorosa, notó María Josefa que el moribundo apretaba su mano de un modo significativo, y creyó que los ojos, vidriosos y sin luz interior, decían claramente a los suyos: "Acuérdate, dieciséis ladrillos... Un millón de reales en peluconas..." Los primeros días después del entierro se consagraron, naturalmente, al duelo y a las lágrimas, a los pésames y a las efusiones de tristeza. Los dos hermanos, abatidos y con los párpados rojos, cambiaban pocas palabras, y ninguna que se refiriese a asuntos de interés. Sin embargo, fue preciso abrir el testamento; hubo que conferenciar con escribanos, apoderados y albaceas, y una noche en que José María y María Josefa se encontraban solos en el vasto salón de recibir, y la luz desfallecida del quinqué hacía, al parecer, visibles las tinieblas, la hermana se aproximó al hermano, lo tocó en el hombro, y murmuró tímidamente, en voz muy queda: -José María, he de decirte una cosa..., una cosa muy rara... de papá. -Di, querida ... ¿Una cosa rara? -Sí, verás ... No te admires... Hay un millón de reales en monedas de oro, escondido en el cortijo de Guadeluz. -¡No, tonta! -exclamó sobrecogido y con súbita vehemencia José María-. No has entendido bien. ¡Ni poco ni mucho! Donde está oculto ese millón es en la Corchada. -¡Por Dios, Joselillo! Pero si papá me lo explicó divinamente, con pelos y señales... Es en la sala baja; hay que contar dieciséis ladrillos a la izquierda, desde la puerta, y al diecisiete está la piedra con argolla que cubre el tesoro. -¡Te aseguro que te equivocas, mujer! Papá me dio tales pormenores, que no cabe dudar. En la dehesa, junto al muro del redil viejo, que ya se abandonó, existe una especie de pilón donde bebía el ganado. Detrás hay una arqueta medio arruinada, y al pie de la arqueta una losa rota por la esquina. Desencajando esa losa se encuentra un nicho de ladrillo, y en él un cofrecillo con un millón de peluconas y centenes... -Hijo del alma, ¡pero si es imposible! Créeme a mí, cuando papá te llamó estaba ya peor, muy en los últimos; quizá la cabeza suya no andaba firme, ipobrecíto! Yo tengo sus palabras aquí esculpidas... -María - declaró José cogiendo la mano de la joven, después de meditar un instante -, lo cierto es que hay dos depósitos, y sólo así nos entenderemos. Papá me advirtió que me dejaba ese dinero exclusivamente a mí... -Y a mí que el de Guadeluz era únicamente mío... -¡Pobre papá! murmuró conmovido el oficial ¡Qué cosa más extraña! Pues... si te parece, lo que debe hacerse es ir a Guadeluz primero y a la Corchada después. Así saldremos de dudas. ¡Qué gracioso sería que no hubiese sino uno! -Dices bien confirmó María Josefa triunfante Primero adonde yo digo, ¡verás cómo allí está el tesoro! -Y también porque tuviste el acierto de hablar antes, ¿verdad, chiquilla? Has de saber... que yo no te lo decía porque temía afligirte; podías creer que papá te excluía, que me prefería a mí.... ¿qué sé yo? Pensaba sacar el depósito y darte la mitad sin decirte la procedencia. Ahora veo que fui tonto. -No, no; tenías razón -repuso María, confusa y apurada -. Soy una parlanchina, una imprudente. Debió prevenírseme eso... Debí buscar el tesoro y hacer como tú, entregártelo sin decir de dónde venía... ¡Qué falta de pesquis! -Pues yo deploro que te hayas adelantado -contestó sinceramente José, apretando los finos dedos de su hermana. De allí a pocos días los mellizos hicieron su excursión a Guadeluz y encontraron todo puntualmente como lo había anunciado María Josefa. El tesoro se guardaba en un cofrecito de hierro cerrado; la llave no apareció. Cargaron el cofre, y sin pensar en abrirlo siguieron el viaje a la Corchada, donde al pie de la derruida arqueta hallaron otra caja de hierro también de igual peso y volumen que la primera. Lleváronse a casa las dos cajas en una sola maleta; encerráronse de noche, y José María, provisto de herramientas de cerrajero, las abrió, o mejor dicho, forzó y destrozó el cierre. Al saltar las tapas, brillaron las acumuladas monedas, las hermosas onzas y las doblillas; los hermanos, sin contarlas, unieron ambos caudales y los derramaron sobre la mesa, donde se mezclaron como Pactolos que confunden sus aguas maravillosas. De pronto María se estremeció. -Mira, José María, en el fondo de mi caja hay un papel arrollado. -Y otro en la mía - observó el hermano. -Es letra de papá. -Letra suya es. -El tuyo, ¿qué dice? -Aguarda.... acerca la luz... Dice así: "Hijo mío, si lees esto a solas, te compadezco y te perdono; si lo lees en compañía de tu hermana, salgo del sepulcro a bendecirte..." -El sentido del mío es idéntico - exclamó después de un instante, sollozando y riendo a la vez, María Josefa. Los mellizos soltaron los papeles, y por encima del montón de oro, pisando monedas esparcidas en la alfombra, se tendieron los brazos y estuvieron abrazados buen rato.

*_Texto Sexto Básico_*

El león ciego


Costancio Vigil, Argentino

Había en el jardín zoológicoun león ciego.
Ocurrió que cierto día, al aproximarse un anciano a la jaula, el león se incorporoó, levantó la cabeza, aspiró reciamente el aire con las narices dilatadas y sacudió su soberbia melena, que era cuando le quedaba de su antiguo poderío.
El anciano dijo:
-¡César!
Al oír su voz, el león se acercó y metió el hocico entre los barrotes.
-¡César!- repitió el hombre con voz ronca y temblorosa, mientras ponía una mano sobre la cabeza del león.
Poco después, el anciano se hallaba en el despacho del director del jardín zoológico, al cual le dijo:
-Fui cazador en Áfricay a ese león lo traje a Europa, con otros más, para venderlo. Fue el último del que me separé, el que vendí más caro, y así y todo, lo hice con pena. César me demostró siempre especial cariño. Supe más tarde que, ya ciego, había sido donado a este jardín. De paso por aquí sentí el deseo de verlo, pero no imaginé que después de tantos años me reconociera, como si sólo hubiese pasado un día....Yo le propongo un buen negocio; por un león joven y sano usted me entregará el ciego.
-Es conveniente su propuesta- comentó el director-, pues ese animal entristece a los visitantes: pero dígame: ¿qué piensa hacer con él?
-Dentro de poco iré al África, y aprovecharé este viaj para llevar a César- repuso el antiguo cazador-. Quiero que pase sus últimos años libres donde nació, quiero devolverle algo de lo mucho que le quité.
-Juzgo, señor, que su propósito es noble, pero absurdo- dijo el director-. Un león ciego en libertad se morirá seguramente de hambre. Imposible que pueda alimentarse y defenderse de otras fieras.
-No lo creo- replicó el anciano-. César sufrirá al principio algunas privaciones, mas no tardará mucho en orientarse y habituarse a la vida natural. El olfato y el oído le bastarán. Para hallar agua no necesitará los ojos: cazar le será difícil, pero comartirá por las buenas o las malas la presa de otros carniceros, auqnue estoy seguro de que cuando comprenda su desgracia, lo ayudarán. Hemos encontrado animales completamente ciegos en libertad y su estado de nutrición no era tan deficiente como puede suponerse. En los primeros días colocaré a su alcance el alimento necesario, hasta que haga amistad con los otros leones y pueda proporcionárselo por sí mismo.
Meses depués llegaba el antiguo cazador con un grupo de negros y la jaula en que iba César a una llanura de África, en la que abundaban los leones.
Ordenó ue se retiraran los acompañantes, abrió la jaula y llamó a César.
El león salió y se detuvo, con la cabeza en alto, aspirando el aire con fruición, a pequeños sorbos, mientras abría y cerraba los ojos, como si hiciera esfuerzos para ver.
El anciano dijo:
-Esta es tu patria. Aquí encontrarás cuanto perdiste. Irás adonde te plazca. ¡Vete! ¡Eres libre!.......
Pero César no se movía. Un temblor convulsivo estremeció su cuerpo.
El cazador colgó en la jaula grandes pedazos de carney se retiró hacia donde estaban sus acompañantes. Al volverse, despés de un trecho, vio que César lo seguía.
Repitió muchas veces la misma prueba. El león lo seguía siempre y de ninguna manera era posible separarlo de sus amigo.
Conmovido hasta el llanto, el cazador desistió de su propósito y regresó con el león a su patria. Adquirió a cierta distancia de Praga una finca y cercó el terreno a fin de que el animal pudiera andar en libertad sin peligro para nadie. Las personas de la casa se acostumbraron poco a poco a no temerlo.
Cuando el amo salía, César, echado junto al portón de entrada, aguardaba su regreso, como el más cariñoso de los perros. Si el amo demoraba más que de costumbre, se levantaba y caminaba inquieto, lo mismo que un centinela. Al entrar el amor, el león recibía con gran contento sus caricias y lo seguía a todas partes. Si él se sentaba, el león se echaba a sus pies y fijaba en él los blancos ojos como si pudiera verlo.
César dormía en invierno al lado de lacama de su amigo y durante el verano en el umbral de la puerta.
Tan singular y conmovedora amistad duró hasta la muerte del noble león , que llegó al fin de su vida antes que el amo. Este le hizo enterrar en una honda fosa en el mismo terreno y mandó colocar encima de ella un hermoso león de mármol blanco con esta inscripión. "Aquí está sepultado el ser a quien hice el mayor daño. Me perdonó noblemente y fue el mejor y el más fiel de mis amigos"

*_Texto Quinto Básico_*

Por una docena de huevos duros

Cuento, Ernesto Montenegro

Un hombre que no podía más de pobre se resolvió a irse un buen día a las minas de la "Descubridora" por probar suerte, dejando lo poquito y nada que había en el rancho "pa" la manteción de los chiquillos y una hermana viuda con sus huachitos. Después de caminar todo el día por cuestas y barrancas llegó, a la puesta del Sol, a un lugar donde se resolvió hacer de tripas corazón y pedir que lo convidaran con algo para pasar la fatiga. En la última puerta que vio abierta divisó a una señora solita junto al brasero, con su gato y sus gallinas: -Por la mucha "necesidá" no más, patroncita, ¿podría convidarme con unos huevitos fresco?, que cuando venga de vuelta se los pagaré bien pagados, se lo prometo.
En esos días los huevos costaban tan poco que no valía la pena ir a buscarlos a los nidales; y como la señora había puesto el tacho a hervir para tomar mate, cogió dos puñados de la canasta y los puso a hervir hasta que tuvo rezados tres credos.
El minero se fue muy contento y agradecido con su docena de huevos duros, y con eso le alcanzaron las fuerzas para llegar a las minas, donde se decía que la gente se estaba aburriendo de tanto contar plata de piña.
Como a los diez años de trabajar su veta, el minero vio que ya había juntado su buen poco y que lo mejor sería partir para su tierra a socorrer a la familia.
Pero tuvo muy presente su promesa de pasar por donde la señora que tenía la crianza de pollos, para cumplirle la palabra. Ahí mismo paró la tropilla de burros que venían arreando, y golpeó la puerta.
Al rato vino a salir una viejita medio cegatona y sorda de yapa, que se quedó mirándolo por encima de los espejuelos. -¿Qué ya no me reconoce, mamita?- le gritó junto a la oreja-. Yo soy aquel caminante que pasó por aquí sin cocaví, y usted habilitó con una docena de huevos. Bueno, aquí vengo a cumplirle lo prometido. Una de estas cargas de plata es para usted; elija l que más le guste.
Y ahí mismo el minerito fue fue descolgando unas cuentas por el corral. La vieja no entendió bien lo que le proponía, pero comenzaba a pasarle lo que a otros, que con los años se van poniendo avarientos.- Digame joven: ¿es verdad que todo lo que llevan los burritos es de plata? ¿Y "uesté" fue a ganar toda esa platita después de que yo le fié los huevos?
La veterana no podía conformarse con una carga, cuando los burros eran tantos. Y pensaba que si ella no hubiera tenido tan buen coraón, el hombre se muere de hambre sin remedio y entonces buena minita que se hubiera encontrado...- A ver, ¿cuánto tiempo dice que hace que le entregué esos huevos? -Calculo que harán bien sus diez años, mamita. Fue antes del temblor grande.
El gesto se le avinagró del todo a la vieja. -Puchas la gente "desconsiderá"- rezongó-. Querer contentarme con una carguita de plata, cuando si yo guardo mis huevos y se las doy a empollar a mis gallinas, ¿cuántos miles y miles de pollos cree que tendría ahora? Tener la desfachatez de venirme con esos cuentos. ¿O cree que por andar vestida de lana, han de tomarla a una por oveja? ¡No, señor, ayúdame a "dentrar" la tropilla al corral! ¡Le digo que toda la plata es mía!
Y tirón por aquí, garrotazo por allá, ella mima encerró a todos los burros y le puso la tranca a la puerta. El minero, que eraun alma de Dios, no atinaba qué hacer con aquella vieja loca. Echarle la puerta abajo y llevarse sus burros a la fuerza tal vez hubiera sido peor.
Había tomado, pues, para el pueblo, arrastrando los pies y con la cabeza gacha, cuando oyó que le decían en tono medio alegre. - ¿No me dirá, amigo, qué es lo que se le ha perdido?. Era un hombrecitode chaqué promo, con nariz de tomate remaduro. El minero tenía ganas de desahogarse del atropello y se lo contó todo. - ¿Y eso es lo que te ha puesto el ánimo por el suelo? No se le dé nda, amigazo. Mire que yo soy "abogado recebido", y le prometo ganarle el pleito a la vieja mañana mismo. Pase a que lo citen a comparendo para las dos de la tarde, y espéreme en el "juzgao"
Y le sacó el último peso que le quedaba, para seguir emborrachándose.
Al otro día, ya esta el minero donde el juez, también la vieja, y en tinterillo sin aparacerse por ningún lado. -¿En qué anda su abogado que no llega?- le preguntó el juez con cara de vinagre al minero-. Le advierto que si no cumple la citación, le condeno con costas.
Las dos que las están dado, y el tinterillo que entra muy acalorado y barriendo el sueño con el sombrero. - Le ruego a Usía me perdone si lo he hecho esperar; pero tenía tanto apuro en cocer una cebada antes de sembrarla.....El juez lo paró en seco.
-¿Qué es esto de cocer la semilla, eh?
¡Vaya a contarle eso a su abuela!-gritó, pegando un golpe en la mesa que por poco la parte-. Contimás que me tiene esperándolo el caballerito, salirme ahora con ese disparate.
-Me extraña, su Señoría, que se enoje conmigo por lo que acabo de decirle, y muy bien que tuvo paciencia para oírle a esta mujer que reclama miles de pesos por la crianza que iba a sacar de una docena de huevos duros que le fijó a este buen hombre.
-¡Cómo!- exclamó el juez, saltando así tan alto de sus asiento-. ¿Estaban cocidos los huevos, entonces? ¡Juró decir la verdad!
-Así fue, señor; por mejor se los di duritos.
-Bueno, amigo- le dijo el juez al minero-. Páguele su real y medio a esta vieja abusadora, y llévese su platita, que harto le ha costado ganarla.
El tinterillo recibió su carga de plata por lo bien que defendió el pleit, y el minero salió arreando sus burros, contento como unas "pascuas".

*_Comprensión lectora_*

Estrategias para mejorar la comprensión de la lectura

Según Burón, toda estrategia basada en el proceso de la lectura tiene que partir de un par de cuestionamientos previos: ¿Qué sabemos sobre el tema? ¿Qué más queremos saber sobre el tema? Además, nos índica que estas interrogantes deben hacerse explícitos en el inicio de la actividad lectora. Es importante, además, que los estudiantes verbalicen las contestaciones a estas y que el docente conozca las hipótesis, predicciones y expectativas de sus alumnos; para luego retomarlas en el momento de la poslectura.

Aporte de ideas: Consiste en hipotetizar o consignar lo que ya se sabe. El proceso comienza cuando el maestro o profesor pide a los alumnos que digan todo lo que piensan, sienten o saben del tema de estudio o del contenido textual. Ayuda y estimula al grupo a formular preguntas para abordar al texto, o para que manifiesten sus expectativas de lectura. Los alumnos hacen un registro individual, a modo de preevaluación del aprendizaje, de lo que piensan que saben o que dirá el texto.


Categorización: Exige un pensamiento más reflexivo. El docente pedirá que se busquen formas de categorizar las ideas vertidas. Los alumnos deben encontrar categorías o grupos de ideas que se relacionen entre sí. Este proceso es posterior al momento en que se vierten las ideas. Esto permite anticipar las categorías básicas y las estructuras organizadoras del texto.


Predicción: Sirve para mejorar la habilidad de lectura de un texto expositivo. En esta estrategia se debe sugerir a los alumnos que formulen predicciones de las categorías básicas que los autores habrían tenido en cuenta al hacer su obra. Haciendo predicciones los estudiantes se aproximarán a la lectura pensando en la organización y los elementos que componen la lectura.

Formulación de preguntas: El rol del maestro en esta estrategia es encontrar preguntas que puedan guiar la búsqueda del conocimiento del lector, la cual es de extrema importancia. No se debería iniciar la lectura de un texto hasta que no hayan surgido, del grupo, algunas preguntas que realmente guíen la lectura.

Formulación de un propósito para la lectura: Esta, es la que dará relevancia y autenticidad a la actividad de leer. Este propósito debe estar pensado desde el enfoque de los alumnos y no desde el del maestro.

*_Texto Cuarto Básico_*

Don Zorro, confesor


Autor: Carmen de Alonso


Tantán..., tantáaaan..., tantán..., tan..., tan... Así llamaba contenta la campana de una iglesita de pueblo, cuando don Zorro acertó a pasar por allí.
"¡Vaya, vaya —se dijo—, qué buenas gentes vienen a oír misa!"
Y al decir "buenas gentes", ¿sabes tú?, don Zorro miraba codicioso a don Pavo, que en esos precisos momentos, con sus pasos ceremoniosos, lentos y largos, y muy de guantes, terno negro y bastón, llevaba a toda su familia a la iglesia.
Sin embargo, la sorpresa de don Zorro llegó al colmo cuando, al volver la esquina, tropezó con mamá Oveja, que llevaba de la mano a sus dos tiernos hijos, unos corderitos que asomaban sus desnudas naricillas y sus ojuelos tímidos entre albos vellones de suaves lanas.
"¡Qué buen bocado!", suspiró don Zorro, relamiéndose goloso los labios. Y ante mamá Oveja, después de sacarse muy cumplidamente el sombrero, se disculpó:
—Ah, mi señora doña Oveja, haga el favor de perdonarme. Ya ve usted que no hubo intento.
Y mamá Oveja, que es muy calladita y muy humilde, apenas levantó los ojos para decir:
—No hay de qué, don Zorro.
Y eso sí que como todas las ovejas del mundo tiritan de miedo de sólo oír nombrar a don Zorro, apretó más y más el paso y aseguró entre las suyas las manos de sus corderitos.
—Apurarse, apurarse, mis hijitos, que vamos atrasados.
Don Zorro siguió también su camino, pero ahora una idea mala le volvía y le revolvía en la cabeza.
"¿Y por qué no? ¿Y por qué no?", se iba preguntando a sí mismo y a cuanta cosa hallaba.
—¿Y por qué no, verdad, mi señor don Maitén? ¿Y por qué no, verdad, mis amigas Piedras?
Y ni el Maitén ni las Piedras se dignaban oírlo, mas él seguía ufano, pensando y retocando la idea mala.
Esa noche y las siguientes, don Zorro durmió poco y mal. Sufría de largos desvelos a causa de la idea aquella que se le había puesto entre ceja y ceja, hasta que al fin, después de darle vueltas y más vueltas en su astuto cerebro, decidió ponerla en práctica.
Y así..., a la mañana siguiente, tan de albita que apenas teñía el sol los picachos más altos de la cordillera, fue don Zorro a situarse ni cerca ni lejos de la iglesia: ni tan cerca que lo descubriese el señor Cura, ni tan lejos que él no pudiese ver a todo el que entrase o saliese de la iglesita.
El frío de la mañana le mordía las empinadas orejas y le entumecía las patas. Entonces, don Zorro, para espantar al frío y para calmar su impaciencia, púsose a ir y venir en un espacio cortito, sin quitar por eso la vista de las puertas de la iglesia.
Pasaban los minutos..., pasó una larguísima media hora, y pasó otra no menos interminable, hasta que por fin, con muchos rezongos de bisagras, entreabrióse poquito a poco la puerta de la iglesia, y por allí, primero una mano y la punta de la nariz..., en seguidita la otra mano y la cabeza entera desgreñada y soñolienta..., y por último el cuerpo todo, largo, muy largo, apareció el sacristán.
Don Zorro empinó a modo de antenas las orejas y sonrió satisfecho.
"¡Qué bien, qué bien..., ya comienza!"
El sacristán, a todo esto y restregándose mucho los ojos para echar de ellos el sueño, salió a la calle y comenzó a mirar para este lado y para el otro, como buscando a alguien.
Don Zorro, que para realizar sus malvados planes había seguido durante dos semanas las idas y venidas del sacristán y del señor Cura, no se inquietó por las preocupaciones de aquél, sino que, por el contrario, estúvose muy tranquilo, a sabiendas de en qué irían a parar todos aquellos afanes.
Y en efecto... Siempre peleándose con el sueño, el sacristán salió de la iglesia y fue con sus grandes trancos hasta la esquina próxima, y una vez allí, ¡vaya si lo sabía don Zorro!, detuvo al primer coche que pasó y, después de cambiar unas cuantas palabras con el cochero, subió al pescante, y en un dos por tres coche, cochero y sacristán estuvieron frente a la puerta de la iglesia. Allí los esperaba, sumido en la amplia sotana, el bueno del señor Cura.
Acomodóse en el asiento trasero del coche, y éste partió renqueando por las piedras de aquella calle provinciana.
Don Zorro se atusó con nerviosa alegría los tiesos bigotes y aguardó el desenlace acostumbrado de lo que estaba espiando.
No tardó en salir de nuevo el sacristán y ahora golpeó con fuerza las puertas de la iglesia para convencerse de que las dejaba bien cerradas. Se alejó en seguida a trancos cada vez más largos y disparejos, sin volverse a mirar hacia atrás.
Al verlo perderse de vista, don Zorro se restregó satisfecho las negras manos y muy orondo se acercó a la iglesia, e ingeniándose en una y otra forma, logró entreabrir las puertas que hacía unos minutos apenas había cerrado tan cuidadosamente el sacristán.
Por ahí deslizó con grande astucia su cuerpo, y ya adentro, sin perder un segundo, comenzó a realizar sus planes. Ágil, muy ágil, trepó la escalerilla que llevaba al pequeño campanario, y al principio con temor, luego con más y más aplomo, púsose a agitar la campana llamando a misa.
El primero en oír el toque insistente de la campana fue don Gallo, que, en esos precisos momentos, se hallaba esponjando su bello plumaje sobre el techo del gallinero.
—¡Hija..., hijaaa! —llamó a su esposa, una linda Gallina de color cobrizo.
Doña Gallina estaba preparando muy apurada el desayuno para sus hijos y se hizo la desentendida.
—¡Hijaaaaaaa..., hijaaaaaaaa! —insistió don Gallo.
Entonces, la señora Gallina volvió sus ojillos redondos hacia su marido y respondió sorprendida:
—Pero, ¿qué pasa? ¿No ves que estoy ocupada? Los "chicos" (al decir "chicos" se refería a sus Polluelos) aún no se desayunan..., llegarán tarde al colegio.
—Hoy no se va al colegio, mando yo —respondió con áspera arrogancia don Gallo, agitando airosamente su elegante cola.
—¿No? ¿Y adónde se va entonces? dijo doña Gallina, toda perpleja.
—¡A misaaaaaaa..., a miiiiiiisa! Vamos todos a misa, a confesarnos.
—Raro que hoy llame a misa el señor Cura —argumentó doña Gallina—, pero claro que iremos. En un santiamén alisto a los "chicos".
Y contoneándose, doña Gallina fue poniendo los trajecitos domingueros a sus polluelos. Arregló asimismo los tazones de leche con arroz para sus hijos, y mientras éstos picoteaban y picoteaban, entre hambrientos y juguetones, dispuso dos docenas de huevos y unos panecillos olorosos en una cesta de mimbre para el buen señor Cura.
A todo esto, don Gallo, muy limpio y confiado, bajó de su soleada terraza y, seguido de su esposa doña Gallina y de su parvada de hijos, encaminóse a la iglesia.
También escucharon el llamado a misa los señores Gansos, que vivían en un fragante huerto vecino, y unos Cisnes, y unos Patos, Taguas y Pidenes, que tenían sus casitas pintorescas en los frescos totorales de una laguna cercana al pueblo.
—¡Vaya, vaya, tenemos de nuevo misa! —exclamó muy sorprendida la señora Tagua.
—Así estoy viendo —subrayó don Pato, mientras en un movimiento breve y sedoso de sus alas tornasoladas se deslizaba hacia el agua de la laguna.
—Creo que deberíamos ir. ¿No le parece a usted? Mire..., escuche las campanas invitan:
"Vengan..., vengan...., vengaaan..."
—Efectivamente, comadrita —terció con su voz chillona don Pitigüe.
Y así, al poco rato, en ruidosa caravana, toditos los habitantes de la laguna, Cisnes, Patos, Taguas y Pitigües, iban caminito de la iglesia.
En un descanso, trabaron amistad con un grupo de Diucas, entretenidas en escarbar la tierra recién removida por el arado.
—¿Y adónde van? —preguntó la más atrevida de ellas.
—Vamos a misa..., vamos a misa, vamos a misa —replicó la alada caravana.
—Podríamos ir con ustedes..., a pesar de que estamos tan desarregladas...
—Dios mira los corazones y no los adornos —concluyó doctoralmente el más viejo de los Patos.
Entonces, las Diuquitas sacudieron sus gorgueritas y pecheras de un tenue matiz blanco grisáceo y se unieron a la caravana invitante.
Y... todo resultó tal como don Zorro lo venía deseando y proyectando.
A medida que la campana llamaba:
"¡Vengan, vengan, vengan!", iban llegando, incautos y devotos, los señores Gansos, don Gallo y su distinguida familia, y en fila larga y dispareja, los habitantes todos de la laguna.
Cuando don Zorro vio que habían llegado ya tan sabrosos fieles, abandonó el campanario y, busca que te busca, halló al fin una raída sotana del señor Cura, se la puso y se fue a instalar de confesor en el rincón más oscuro del confesionario de la iglesia.
No tardó en acercarse por allí doña Gallina.
—Acúsome, Padre... —y ¡zas!, sin darle lugar ni siquiera para un cacareo de auxilio, don Zorro alargó la pata, le apretó el pescuezo y la metió apresuradamente en un saco que tenía a su lado.
Pasaron en seguida a confesarse, unos tras otros, los doce Polluelos de doña Gallina, y toditos, con sus sedosos y tibios plumones color de la flor del aromo, no alcanzaron a lanzar ni un pío–pío de angustia entre las crueles y peludas manazas negras de don Zorro.
Idéntica suerte sufrieron don Gallo, los señores Patos de la laguna, los elegantes Cisnes, los Gansos, las Diuquitas, las señoras Taguas y los desgarbados Pitigües.
Pero, como tú sabes, es la ley de Dios que toditas las criaturas malas reciben su castigo más tarde o más temprano; así también a don Zorro le iba a llegar muy pronto, muy pronto, el suyo.
Aconteció, entonces, que don Zorro iba ya a alejarse muy satisfecho con su sabrosa carga, cuando entre dos tiritones de espanto divisó a don Perro, que, grandote y fiero, así, así, se acercaba, se acercaba al confesionario.
"¡Ay de mí —suspiró, y le castañetearon de susto los dientes todos a don Zorro—, aquí sí que estoy en peligro!"
Y don Perro siguió acercándose..., acercándose..., tanto, que el aliento le alcanzaba a don Zorro, la piel erizada por el terror.
Sin embargo, don Perro se portó muy compuestito y con los ojos bajos se fue a hincar en el confesionario.
"Pueda ser que no me reconozca", hacía votos don Zorro.
Pero... y aquí, mi vida, en este "PERO" mayúsculo, estaba todo el error de don Zorro: no sospechaba él ni remotamente que don Perro venía, como se dice, siguiéndole los pasos, porque para eso había visto él pasar en coche al señor Cura, camino del pueblo vecino, de modo que su nervioso llamado a misa habíale llenado de sospechas.
Bueno, y como tú sabes que los perros tienen un olfato muy fino, ¡ps!, nadita le costó hallar y seguir el rastro del malvado don Zorro.
Para las sagaces narices de don Perro no valían ni la raída sotana del señor Cura, ni sus gruesos lentes, ni la oscuridad del confesionario.
"Voy a darle una agonía larga a este bellaco", resolvió don Perro, al convencerse de que ave que iba a confesarse era ave que no volvía a aparecer más.
—Buenas tardes, Padrecito —saludó con melosa voz don Perro.
—Buenas te las dé Dios, hijo. ¿Vienes a confesarte?
—Sí, Padrecito; he sido muy malo, pero estoy arrepentido.
Don Zorro, engañado por el acento tan inocente de don Perro, se dispuso a dominar los nervios.
—Comienza no más, hijo, y date prisa, porque hay muchos esperando.
—Acúsome, Padrecito, de que una vez mordí a un niño...
—Ah, eso... casi... , casi no es pecado, hijo. Continúa..., continúa, que estoy muy apurado.
Y don Zorro comenzó de nuevo a temblar. A través de las débiles rejillas del confesionario sentía a don Perro que olfateaba, que olfateaba, amenazador.
—Acúsome, Padre, que otro día robé unas Gallinas y unos Patos.
—Robar Gallinas y robar Patos no es pecado, hijo, pero confiésate más de prisa..., más de prisa.
Don Perro, como ya te dije, se había propuesto castigar a don Zorro, dándole una agonía larga, y así lo hacía desesperarse con unos pecados imaginarios que no terminaban nunca.
—Acúsome, Padrecito, que otro día maté una Liebre, una pobre Liebre que hallábase barriendo la puerta de su casa, en un manchón de zarpas.
—Matar Liebres no es pecado, hijo, aunque éstas se hallen barriendo la puerta de su casa; pero, por misericordia, apúrate, hijo mío, estoy urgidísimo de tiempo.
La voz de don Zorro era entrecortada, anhelante: ya no le cabía duda de que don Perro lo había reconocido. Sin embargo, éste continuaba inmutable y olfatea que te olfatea.
—Acúsome, Padrecito..., que otra vez... andaba yo con hambre... y cace... ¡un ZORRO!
—¿Cazaste un ZORRO has dicho, hijo mío?
—Sí, Padrecito, y me lo comí enterito.
Don Zorro notaba que por ahí, por el ladito del corazón, la oscura sotana le subía y le bajaba, agitadamente, con desesperación. ¡Ahora sí que estaba perdido!
Y fue entonces, mi vida, cuando don Zorro, con voz temblorosa y con los ojos arrasados por gruesos goterones de terror; respondió a don Perro:
—Ay, hijo, ¿por qué hiciste eso? Ése si que es pecado grande, muy grande, muy requetegrande... Cazar Zorros es pecado mortal. Mas, ¿por qué estás tan inquieto? A ver; termina pronto tu confesión, hijo mío, termina pronto... , prontoooooo.
Al notar el angustioso desasosiego de don Zorro, don Perro sonrió burlesco, mostrando los filudos y amenazadores colmillos.
—Vaya, Padrecito, lo que es ser ignorante. ¿Así es que matar Zorros es pecado muy requetegrandazo, ah? Bueno, y ¿qué irá a decir usted ahora? Porque acúsome, Padrecito..., acúsome... de que ¡me lo voy a comer a usteeeeeeed!
Y sucedió, entonces, lo que tú ya te habrás imaginado: al oír esto, don Zorro dio un brinco desesperado y quiso echarse a correr; pero don Perro dio un salto más rápido y clavó sus temibles colmillos en la peluda y blanca garganta de don Zorro.
—¡Aaaaaah..., aaaaah..., aaaaaah! —alcanzó no más a decir el bellaco de don Zorro y expiró ahí mismito, junto al saco donde, sólo momentos antes, había estado guardando a sus confiadas victimas.
Don Perro, que era muy desconfiado cuando de Zorros se trataba, no abandonó el confesionario hasta que se convenció de que don Zorro, de ahí en adelante, no haría más fechorías porque estaba muerto, bien muerto.
Luego, salió despacito, juntó bien la puerta de la iglesita y se fue satisfecho, mientras pensaba:

"Un malvado menos..., un malvado menos".

*_Texto Tercero Básico_*

Dos amigos que se van
(León Tolstoi)

Casi al mismo tiempo llegaron al fin de sus vidas Bolita y Milton. El cosaco no entendió que Milton era un perro de caza, rastreador, especial para la caza de aves y especies pequeñas, y lo llevó a cazar jabalíes. Un jabalí lo atacó y le dio muerte.
Por su lado, Bolita vivió muy poco más después de librarse de la matanza de perros en Piatigorsk. Después de ese angustioso episodio se puso muy triste y principió a lamer cuanto se hallaba a su paso. A mí me lamía las manos, pero en una forma distinta a la de siempre; no precisamente como una caricia. Hacía presión con la lengua, y me mordía, aunque se notaba que no quería atacarme. Yo retiraba mi mano y entonces él lamía mis botas, o la pata de una silla o de una mesa, y también las mordisqueaba. Esta extraña conducta duró dos días; después Bolita desapareció, se hizo humo.
Era imposible pensar que a un perro como éste lo robaran, y más difícil aún resultaba imaginar que me había abandonado. Entonces caí en la cuenta de que hacía exactamente seis semanas que lo había mordido el lobo y comprendí que Bolita estaba contagiado por la rabia.
Los animales que contraen esta enfermedad sufren contracciones convulsivas y dolorosas en la garganta, y tienen sed, pero no pueden tomar agua porque las contracciones aumentan. Agobiados por los dolores y la sed, enloquecen y muerden.
Recorrí los alrededores buscando a Bolita, pero no logré hallarlo ni obtener noticia alguna sobre su paradero. Si hubiera andado por distintos lados mordiendo a la gente, como es usual en los perros rabiosos, se habría sabido.
"Lo más probable es que haya muerto en el bosque", pensé. Entre los cazadores se dice que cuando un perro inteligente es atacado por la rabia, huye al campo o se interna en los bosques, para revolcarse en las hierbas bañadas por el rocío y hallar las plantas que puedan sanarlo. Bolita no logró sanar porque jamás regresó a la finca.

*_Texto Segundo Básico_*

El camaleón confundido


En una hoja verde estaba sentado un camaleoncito verde. Al saltar a un árbol café, el camaleón empezó a volverse café. Después se posó en una flor roja y enrojeció. Mientras atravesaba la arena amarrilla, se puso amarillento como ella.
Cuando estaba calentito y había comido, el camaleón se ponía de un verde resplandeciente. Pero cuando tenía frío y estaba hambriento, se volvía gris, se quedaba quieto y esperaba. Sólo se movían sus ojos- arriba, abajo, a los lados- hasta que veía una mosca. Entonces el camaleón disparaba su larga y pegajosa lengua para atraparla.
Y así se pasaba la vida; una vida que por cierto no era muy emocionante. Hasta que un día....¡el camaleón vio un zoológico!
Jamás había visto tantos animales tan hermosos.
Entonces el camaleón pensó: -¡Qué pequeñosoy, qué lento, qué débil! Quisiera ser tan blanco y tan grande como el oso polar.
Y su deseo se hizo realidad. ¿Pero acaso se sintió feliz? ¡No!-¡Quería ser tan hermoso como un flamenco! ¡Ser tan listo como un zorro! ¡Nadar como un pez! ¡Correr como un venado! ¡Ver las cosas que están lejos como la jirafa! ¡Ocultarse eb ek caparazón como la tortuga! ¡Ser tan fuerte como el elefante! ¡Ser tan gracioso como la foca!
-¡Quisiera ser como la gente!- se dijo a sí mismo.
Y sus deseos se volvieron realidad. Entonces pasó una mosca. El camaleón estaba muy hambriento, pero también estaba hecho una mezcolanza: era un poco de esto y de aquello, y no pudo atrapar a la mosca.
-¡Quisiera ser yo mismo!- se lamentó.
Y el deseo del camaleón se hizo realidad y .....¡atrapó a la mosca!
Autor: Eric Carle

Categoría dominio lector, primero básico

En la siguiente rúbrica se definen las seis categorías de dominio lector para ubicar a los niños de primero básico: http://www.educandojuntos.cl/dms/cat_1564.html

Excelente
Cumple con la descripción de la categoría “muy bien” y presenta una fluidez lectora muy rápida.

Muy bien
Reconoce todas las letras, lee palabras completas y presenta una buena fluidez lectora, requiriendo poco tiempo para terminar de leer la evaluación.

Bien
Lee palabras completas, reconoce la gran mayoría de las letras, aunque presenta algunos errores de reconocimiento. Presenta fluidez lectora, aunque lenta, demorando en articular algunas palabras.

Suficiente
Domina algunas sílabas, no reconoce todas las letras, comete errores importantes de reconocimiento y pronunciación; omite, se salta palabras, inventa. Demora mucho tiempo en leer.

Insuficiente
El alumno domina una o dos sílabas o letras de la evaluación, tomando mucho tiempo en articular lo que lee.

No lector
El alumno no reconoce las letras, es incapaz de leer una palabra.

*_ Texto Primero Básico_*

La Mona Felisa

La mona felisa, se mece sin prisa derecha, izquierda, arriba, despacio, despaci
o.
La mona felisa se mece sin prisa se lava, se peina y al mono Felipe le hecha una sonrisa
El mono Felipe se mece sin prisa derecha, izquierda, arriba, abajo, despacio, despacio.
La mona lo mira, el mono suspira.
La mona va de puntillas.
El mono le hace cosquillas.
La mona Felisa se muere de risa, y un monito triste que la ve reír le dice:
¡Felisa, regálame una sonrisa!

autor: Marisol Perales

30/11/08

::*Día de la carrera*::


En el encuentro que tuvimos el día 27 de noviembre del presente, se abordaron diversos temas, compartimos con los futuros profesionales de nuestra bellísima profesión....tema interesante es conocer que es la psicopedagogía y el rol que tendremos dentro de esta sociedad y dentro de un campo laboral conocido y por conocer.....un día de crear redes de apoyo, de reír y de aprender.


¿Qué es la Psicopedagogía?

Disciplina que estudia la naturaleza y los procesos del aprendizaje
humano, formal y no formal, contextualizados y sus alteraciones.
Careaga, R. (1998).

Seguir pensando que los psicopedagogos sólo tienen que desarrollar su práctica laboral con alumnos con trastornos del aprendizaje, es un error y una limitación al verdadero valor transformador que pueden tener.(M. Paz Bruner Achondo)

Donde hay un sujeto que aprende inserto en un sistema formal o no formal y que presenta una dificultad, existe la necesidad psicopedagógica.(Benezra, E y otros. 1993)
Después de nuestra actividad académica......nos fuimos a celebrar y a compartir..nos lo mereciamos, ha sido un semestre lleno de cositas....asi que una merecida tarde recreativa....buena tarde con toda la gente de psicopedagogía jijiji

__*Organiador Gráfico*___


Los Organizadores Gráficos son técnicas de estudio que ayudan a comprender mejor un texto.....en más de alguna ocasión estos nos han permitdo aprendernos aquella materia que no queríamos aprender.....lo bueno de esto es que establecen relaciones visuales entre los conceptos claves de dicho texto y, por ello, permiten “ver” de manera más eficiente las distintas implicancias de un contenido. Algunos de ellos son:

  • Esquemas
  • Mapas Conceptuales
  • Línea del tiempo
  • Constelación de palabras
  • Cuadro Anticipatorio
  • Diagrama de Venn
  • Secuencia de Hechos
  • Círculo problema/solución o causa/efecto
  • Templo del Saber
  • El Peine
  • Cancha de Tenis

::*EsCrItUrA fOrMaL*::

Paráfrasis.......!!!!
Las paráfrasis son interpretaciones y explicaciones que tienen la misión de hacer más diáfano y comprensible el devenir y el porvenir....esto quiere decir....La paráfrasis consiste en decir los contenidos de un texto con las propias palabras.

Cita Directa- "El plagio se define mejor como una actividad deliberada – la copia consciente del trabajo de otros" (Swales, 1998, p. 78).

Cita Indirecta- Paráfrasis- John Swales ha dicho que el plagio ocurre cuando una persona copia el trabajo de otra y es perfectamente consciente de lo que está haciendo.

Experiencia Comunicativa.......
Es cierto, que es de enorme utilidad el poder adquirir determinadas destrezas sociales y una de ellas es el escribir cartas, dentro de esta categoría están

Cartas al director
Discursos de despedida
Carta de excusa
Carta renuncia
Carta de saludo
Carta de presentación
Carta de recomendación
Carta de condolencia
Carta poder....entre otras......

Experiencia Personales.....
Están referidas a la toma de conciencia de la propia interioridad y del valor personal del pasado y del presente de cada uno



Autobiografía.......Algo de Mí.......Hace unos veinte años atrás, específicamente un jueves 18 de febrero de 1988, nació una niña, cuyo nombre era Nicole Pamela, sus padres eran dos jóvenes que decidieron darle amor a esta pequeña criatura que acababa de nacer y les cambiaría sus vidas por completo fue así como estas tres personas formaron una familia en la ciudad de Santiago, capital de un país llamado Chile.

Es muy poco lo que recuerdo de mis tres primeros años de vida, estoy segura de que fueron felices, ya que en todas las fotos que tengo salgo con una gran sonrisa, recuerdo muy bien la leche del jardín y cada vez que siento ese olor me bajan unas nauseas horrible, ese es el evento más desagradable de mi vida, recuerdo también a mi fiel triciclo que me acompañaba en las interminables horas de juego y que olvido crecer conmigo. Cómo olvidar los hermosos paseos al Colorado en el Cajón del Maipo, íbamos a ver a mi padre que en ese entonces era cabo del Ejército y custodiaba aquel recinto militar, yo salía con mi tío a cazar culebras y bichos raros, en esos dos años andaba metida por todos lados, disfrutando de aquellos tiempos donde la única preocupación era jugar, durante esos años nació mi primera hermana, un día sábado 23 de mayo de 1992, no recuerdo muy bien como lucía, pero si que llegó hacerme compañía por que jugar sola se estaba tornando muy aburrido, fue así como ya no eramos tres, si no que cuatro integrantes de la familia Ávila Valdés.

Cuando ya estaba lista para entrar a Primero Básico, mis padres decidieron que sería muy buena para la familia salir de Puente Alto, una comuna que cada día se volvía más peligrosa, nos trasladamos a la hermosa ciudad de La Serena a comenzar una nueva vida, estuvimos dos meses en la casa que mi abuelo paterno tiene en Coquimbo, para luego cambiarnos a una casa en el centro de La Serena. Llegué justo a empezar mi primer año escolar en el Colegio Germán Riesco, mi profesora jefe era la señorita Margarita Villarroel una excelente profesora que se esmeró en sus alumnas aprendieran y fueran buenas personas, con mis compañeras y amigas de aquellos años, hoy el contacto es casi nulo gracias a la tecnología del internet he encontrado a cinco y a otras que ha pesar de los notables cambios físicos nos saludamos en alguna vereda. Estuve ocho años de mi vida en aquel colegio y lo más importante que aprendí fue el a valorar la fe, la familia, los amigos y cada una de las cosas que he podido disfrutar.

A mis catorce años postulé al Colegio Andrés Bello, era hora de entrar a primero medio, nuevos profesores, nuevos compañeros una nueva etapa estaba a punto de comenzar el primer año fue difícil, acostumbrarse a los cambios, promedios rojos, jornada completa, pero nació en mi na habilidad que yo desconocía, levantarme aún sientiéndome derrotada, la compañeras se transformaron en amigas y la burbuja en la cual vivía poco a poco dio paso a otro mundo, un mundo que si bien era distinto y desconocido, era agradable y tenía muchas ganas de conocer. Olvidé contarles una de las cosas hermosas que han sucedido en mi vida, fue el nacimiento de mi segundo y último hermano, el conchito, mi socio, nació un 30 de abril de 1997, cuando mi padre nos dio la noticia llorabamos de la emoción.

En aquel año conocí a personas increible, grandes amigos...Cristian.. Roberto...a mis lindas amigas. Los años siendo andresiana fueron de mucha alegría, mis profesores me preparon no tan sólo para la universidad sino que para la vida, el cariño hacia ellos es inmenso. fui presidenta del centro de alumnos en cuarto año medio una experiencia que marcó por completo mi personalidad. Las amig@s de ese entonces son las mismas amig@s incondicionales de hoy, hemos cambiado pero nuestra gran virtud sigue siendo el escucharnos, apoyarnos y jamás criticarnos, serán siempre un tesoro que lleve en mi corazón.

El año 2006 comencé a estudiar la carrera de Psicopedagogía, y cada día me enamoro más de ella, estoy en mi tercer año y es maravilloso todo lo que he aprendido, Gané nuevas amigas que han sido grandes compañeras en este hermoso proceso de convertirme en profesional. conocí en la universidad los infaltables y reparadores carretes, aquel mundo nocturno que sirve para relajarse y pasar buenos momentos con los amigos.

Son veinte años realmente espectaculares, veinte años lleno de experiencias que han servidos, que sirven y que servirán por el resto de los años que queda por vivir, que queda por aprender

Microperiodismo............
Pues....en resumen que les podría decir.....Incluyen actividades narrativas basadas en la recolección de hechos y datos destinados a la elaboración de un ........mi blog es un microperiodismo..un comic también lo puede ser.....imaginen y creen.....es el gran desafío

26/11/08

::::*AnTiPoEsÍa*::::

No se muy bien el significado que tiene la antipoesía y si bien me llama profundamente la atención nunca he tenido la posibilidad de acercarme de forma constructiva a ella..........La antipoesía es una escritura elaborada a partir de la negación de los rasgos esenciales de otras escrituras y de otros códigos literarios. El antipoema es una contradicción, un contratexto. Es el resultado de la reflexión, pero todavía más, de una indagación llevada a cabo en la práctica poética misma.

El hombre imaginario................

El hombre imaginario
vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
a la orilla de un río imaginario
De los muros que son imaginarios
penden antiguos cuadros imaginarios
irreparables grietas imaginarias
que representan hechos imaginarios
ocurridos en mundos imaginarios
en lugares y tiempos imaginarios
Todas las tardes tardes imaginarias
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
que consiste en un valle imaginario
circundado de cerros imaginarios
Sombras imaginarias
vienen por el camino imaginario
entonando canciones imaginarias
a la muerte del sol imaginario
Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del hombre imaginarios

http://www.biblioredes.cl/BiblioRed

::::*AsoCiAcIoNeS dE pAlAbRaS*::::


..........MI......DULCE......SOLEDAD.........


Seguridad infinita,
exquisita confianza,

albergas mis penas,
mis alegrías.
En ocasiones amarga,
por que me haces creer
que tu tienes la respuesta a todo,
me ciego en que posees
las soluciones.
Eres mi eterno amante
mi compañera perfecta
un mundo único
mi mundo!!!!

25/11/08

*:::CrEaCiOneS PoÉtIcAs:::*

PoEmAs.............De alguna forma siempre he querido tratar de hacer poesía y admito no soy muy buena.....pero es el arte de escribir, es la literatura que más admiro.......el expresar sentimientos a través de la magia del lenguaje creo que nos hace seres invalorables, ya que cada elección es cuidadosa y por ello tremendamente valorada.
Un poema Bellisimo que va dedicado especialmente a mis padres, que han dedicado gran parte de su vida por hacer de la mía muy feliz y llenarla de riquezas que no olvidare jamás.................Los Amo


"Enseñarás a volar,
pero no volarán tu vuelo.
Enseñarás a soñar,
pero no soñarán tu sueño.
Enseñarás a vivir,
pero no vivirán tu vida.
Sin embargo...
en cada vuelo,
en cada vida,
en cada sueño,
perdurará siempre la huella
del camino enseñado."
Madre Teresa De Calcuta

23/11/08

:::::*CrEaCiOnEs DiVeRgEnTeS*::::::


Estimulan el pensamiento original y divergente y a “quebrar” tópicos o lugares comunes. Debe ser aplicada desde muy temprano en la escolaridad, constituye nuevas vías para desarrollar la creatividad a través del humor, la fantasía, la visualización, y en la percepción global de la realidad.........algunas de ellas son:

QuEbRaNtAHuEsOs...................

En alguna oportunidad de la vida, se presento a mi una gran noticia....me dijeron la sonrisa nos hace libre nos hace bellos......y fue como así quize expresar aquello a través de esta novedosa técnica .....pero que ufff dio trabajo hacerla ..... y quedo bellisima .......................
Son mensajes que se forman recortando letras de distintas noticias en diarios o revistas, luego se pegan en un papel y resultan noticias diferentes.

CoMpLeTaCiOnEs........................................

Recuerdo muy bien que cuando pequeña mi madre solía jugar conmigo ....ella me decia una frase y mis hermanos o yo teniamos que completarla.....el que la completaba se ganaba un rico panqueque....uyyy que lindos momentos aquellos...ahora ustedes jueguen con sus hijos y con sus alumnos

Si yo fuera...................
Había una vez...............
Cuando yo sea grande.............
Algún día....................
En aquellos tiempos...........
Muy Pronto......................
En mis vacaciones................
El invierno llegó y...................
Si yo tuviera alas..................
Si yo fuera un gigante..............
Si yo pudiera .....................


DeFiNiCiOnEs DiVerGeNtEs....................

Esto si que es algo totalmente nuevo para mi ........pero creeme es muy entretenido poder hacerlas...y mirando otros blog encontre definiciones muy creativas.......son definiciones flexibles y originales en las que son utilizadas otras palabras de diversos significados, pero que pueden, según la forma de mencionarse tener una similitud o algunas de las características con la palabra a definir. También es posible que se utilicen metáforas con el fin de definir. http://esperanzavasquez.blogspot.com/

Cartera: Monstruo de apetito voraz que las mujeres adoptan y llevan a pasear, tanto le quieren que le alimentan con cosas impensadas que ellas encuentran necesarias.

Mar: Paleta de pintor que de mezclar y mezclar manchones quedaron de azules, verdes y demás, sin fondo se podría llegar a pensar, más de inmensas profundidades está, de liquidas lagrimas que vienen y van que el viento mece sin descansar.
Celular: Tecnología que comienza como necesidad, y se vuelve adicción, con una serie de funcionamientos que perturba el pensamiento de los seres humanos.
Beso: Dulce y enternecedora conexión, que expresa diferentes tipos de amor.
Sapo: Resfaloso y repugnate monstruo que estremece desde la punta de los pies hasta el ultimo pelo de la cabeza.

17/11/08

::::::La EdUcAcIóN cHiLeNa::::::::


Hace un tiempo atrás llego a mis manos el decreto supremo de educación N°232 ....la actualización esta hecha el año 2002......comenze a leerlo y ella encontre un párrafo que se quedo muy grabado en mi retina, pero más que eso quedo grabado como una gran utopía.......que si bien suena motivador.....creo que a la educación le falta mucho por llegar aquel ideal......me he propuesto hacer de la educación una herramienta fundaental y base de todos los caminos que la vida misma nos lleva a recorrer....y si bien creo que la educación hoy se aleja de aquello......todo cambio comienza por uno......les dejo aqui un estracto del decreto


"debe ofrecer a todos los chilenos la posibilidad de desarrollar plenamente todas las potencialidades y su capacidad para aprender a lo largo de la vida, dotándolos de un carácter moral cifrado en el desarrollo personal de la libertad; en la conciencia de la dignidad humano y de los derehos y deberes esenciales que emanan de la naturaleza del ser humano; en el sentido de la trascendencia personal, el respeto a otro, la vida solidaria en sociedad y el respeto a la naturaleza; en el amor a la verdad, a la justicia y a la belleza; en el sentido de la convivencia, democrática, el espíritu emprendedor y el sentimiento de la nación y de la patria, de su indentidad y tradiciones"


:::::*ReFrAnEs*:::::



Mis bisabuelos solian contar muchos refranes...luego de cada historia que ellos, mis tios, mi abuela o mi mama contaba o hasta ellos mismos terminaban con un pintoresco, aveces chistoso refran....pero que sin lugar a dudas trai consigo una sabia enseñanza....fuimos educados así...los niños de hoy son educados con internet y poco saben el valor de un refran...por ello hoy he querido hacer referencia a los refranes y a sus enseñanzas

Definición: Un Refran es un dicho agudo y sentencioso que suele contener un consejo o una moraleja

El que mucho abarca poco aprieta..........mi abuelo decia y mi mama me sopla ......que es mejor hacer una o pocas cosas y hacerlas bien, que hacer muchas cosas y que estas no salgan bien y esten mal hechas.

A mal tiempo, buena cara...............es mejor enfrentar los problemas con entusiasmo y saber que todo mejorará

La vida es como una rueda de carreta...............muchas veces tentrás que pasar cosas dificiles, te tocarán persona que causarán más daño que prosperidad, pero la vida trae consigo cosas buenas y malas y al final de cuentas todo aquel daño provocado se devolverá.

Más vale diablo conocido, que diablo por conocer.............es mejor saber como es una persona, con defectos y virtudes, a tener que conocer a otra que no conoces nada de ella.

13/11/08

::::::*FáBuLa*::::::


Desde pequeña mi padre solia sacar un libro gris que tenía muchas fábulas....aquel libro se lo había regalado su padre a los cinco años de edad para una navidad....luego yo solía contarles a mis hermanos y espero que en un futuro a mis hijos....La enseñanza de las fábulas nos estimula significativamente los valores y la capacidad de inferencia en nuestros alumnos.

def:La fábula es un relato breve escrito en prosa o verso, donde los protagonistas son aniamles que hablan. Las fábulas se hacen con la finalidad de educar, lo cual es la moraleja, esta normalmente aparece al final, al principio o no aparece porque se encuentra en el mismo contenido del escrito.


LA ZORRA Y LAS UVAS

Es voz común que a más del mediodía, en ayunas la zorra iba cazando; halla una parra; quédase mirando de la alta vid el fruto que pendía. Causábala mil ansias y congojas no alcanzar a las uvas con la garra, al mostrar sus dientes la alta parra negros racimos entre verdes hojas. Miró, saltó y anduvo en probaturas; pero vio el imposible ya de fijo. Entonces fue cuando la zorra dijo: -No las quiero comer. No están maduras
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